ana
martes, septiembre 27, 2011
FARO DEL SILENCIO
Como a segundos, hay sílabas pesadas que se me traban entre los dientes, entre los labios, poco a poco se deshacen en nada y dejan un sabor postrero en mis palabras, a veces dulce- las menos-, a veces amargo o silente. Ese resto silencioso y cadente que desaparece como hilo de miel y nos ata a la inmortalidad, ese cordel de susurros prodigiosos que arranca del tumulto de sentimientos para llegar al centro del silencio. Es sin duda el letargo ansiado, el rincón oculto junto al manantial de las emociones, donde nos sentamos a escucharnos por dentro y bebemos del agua que no sacia, de la vida. Poco a poco, lo comprendo y entonces, callo...
miércoles, septiembre 21, 2011
AQUÍ ESTOY
Pienso...
y sin embargo el misterio y la pasión no dejan de perseguirme
por el borde de mis antojos se rozan, amantes
como la aurora y el silencio,
como los mirlos de la mañana y las hojas del limonero.
Atisbo un espacio intermedio que unifica
lo distante y desmedido
lo cercano y tibio.
Con asombro su mixtura hace que el papel se enoje
y en el berrinche se amontonen como despojos
los poemas desprendidos de sus hilos.
Estoy...
conspiro contra el ataque despiadado del tiempo
que en flagrante intención desgasta
mi coraje
y agranda la desvergüenza,
mientras las arrugas de mis uñas crecen
sin disimulo,
tras unos dedos que insomnes te buscan
y buscan...
en tus versos.
ana
Suscribirse a:
Entradas (Atom)