[...]Si oídas melodías son dulces, más lo son las no oídas;
sonad por eso, tiernas zampoñas,
no para los sentidos, sino más exquisitas,
tocad para el espíritu canciones silenciosas. [...]
Poema "A una urna griega" John Keats
Versión de Julio Cortázar
No florece ya la rosa silvestre en sus poemas
una tierra baldía, de arbustos secos,
llena la tierra de soles sin cima,
sin lilas, abriles sin lluvia...
Quema el viento los laureles de su voz
antigua como Roma.
Apuntalados versos,
desordenadas ruinas de verdor ceñidas,
dispersas en la perdida inocencia.Crecían antes,
alrededor de los devastados muros,
hermosos e insoportables,
bellos como ángeles terribles.
Emergían de pronto
como una Atlántida antigua,
más allá de las Columnas de Hércules,
desde dentro del mar del alma,
como inmortales guardianes
de nuestras metamorfosis.
ana