Salgo del instante que en punzada temerosa
intentó atravesarme.
El ritual contenía toda una vida de reproches.
Salgo, digo salgo, pero acaso no es la entrada
al humo de los días venideros
sobrados de especias, irrompibles,
volátiles o sonajeros
lo que, cada vez,
da más miedo?
El mar, las avenidas del alma
cobrando fuerza en sus mareas
iluminando un fondo claro
o un horizonte quebrado
por la incertidumbre.
El agua de la vida tan minúscula y excelsa
tan estrecha...
tus manos aun suaves,
como de melodía eterna
escriben cada vez menos silencios.
ana
Only the rhythm of love escapes the harmonies
Leaving us a beat.