Imagen de la cabecera del blog: cuadro de la autora

miércoles, noviembre 21, 2007

CANCION de RAINER M. RILKE


Tú, a quien yo no confío mis largas horas sin sueño;
tú que tan tierna me calmas como una cuna meciéndome.

Tú que tu insomnio me ocultas, dime si soportaremos
la sed que nos magnifica, sin abandono.

Recuerda que a los amantes la mentira les sorprende
en sus confesiones.

Sola tú formas parte de mi
pura soledad.

En todo te transformas: un murmullo
o tu aéreo perfume.

Entre mis brazos: ¡qué abismo que se alimenta de pérdidas!
Mis brazos no te retienen.
Y es por eso justamenteque te tengo para siempre.
Rainer María Rilke.

Escultura: "El beso" de A. Rodin. (A partir de 1905 y hasta 1908, Rilke trabajó como secretario del famoso escultor Auguste Rodin, maestro de su ex esposa Clara. )
Rilke escribió a Rodin:

“(...) Ud es el único hombre en el mundo que, lleno de equilibrio y de fuerza, se yergue en armonía con su obra. Y esta obra, tan grande, tan justa, para mí se ha vuelto un acontecimiento del que sólo podré hablar con una voz transida de temor y de homenaje. Su obra tanto como usted son un ejemplo dado a mi vida, a mi arte, a todo lo que hay de más puro en el fondo de mi alma. No fue sólo para escribir un estudio que vine hacia usted. Llegué para preguntarle, ¿cómo se debe vivir? Y usted respondió: trabajando. Lo comprendo. Bien comprendo que trabajar es vivir sin morir.” (carta a Rodin del 11 de septiembre de 1902)